Hola Chicas, de regreso, espero que les guste este nuevo capítulo, no voy a poder actualizar cada semana, pero les prometo hacerlo 3 veces por mes. Espero que sigan apoyándome como siempre. Gracias por la espera.


Desesperación

 

 

KPOV

La maquillista hacía denodados esfuerzos por esconder las ojeras que tenía debido a las malas noches que había pasado, cuando Charlie se acercó a mí con una gran sonrisa.

_ Kristen, buenos días, de vuelta al ruedo.

_ Hola Charlie, supongo que sí_ dije  devolviéndole la sonrisa.

_ ¿Cómo estuvo tu fin de semana?_ preguntó.

No sé porqué pero algo me decía que sabía muy bien como estuvo mi fin de semana, el chisme estaba en todas partes, Rob y yo tuvimos una discusión y desde luego yo lo maltrate, bueno,  tal vez acertaron en lo de la discusión pero jamás lo maltraté en público como muchas de sus fans aseguraban.

_ Estuvo bien_ respondí mintiendo.

Charlie no tenía porqué saber que Rob y yo habíamos terminado, en realidad nadie tenía porqué saberlo. En realidad muchos sabían a ciencia cierta  que Rob y yo estábamos en una relación, otros lo intuían pero ninguno había tenido ninguna confirmación de nuestra parte.

_ Ya está listo_ dijo Lisa mi maquilladora, mientras se retiraba.

Charlie y yo nos quedamos solos, se acercó un poco más y sostuvo mi mirada fijamente. Me sentí un poco incómoda, me sonrojé inmediatamente.

_ Te ves hermosa_ dijo.

Sonreí incómoda, no me venían muy bien los elogios, en especial de alguien de quien no quería recibirlos.

_ Gracias_ contesté, sin decir más desviando la mirada, dejando en claro que no me sentía  a gusto.

_ ¿Sabes? En verdad eres enigmática_ dijo_ te presentas ante la gente como una chica dura , fuerte, independiente  y muy segura de ti misma, con respecto a tu capacidad, tu talento y tu belleza  pero a la vez eres dulce y muy tímida, ¿por qué no te gusta que te diga que te ves hermosa?

_ Tu lo dijiste, soy tímida, y dicen que soy rara, así que no se dé que te sorprendes_ contesté.

El sonrió, colocó ambas manos en sus bolsillos y me miró mordiéndose el labio inferior. Estaba flirteando conmigo descaradamente.

_ Siempre a la defensiva_ dijo volviendo a sonreír.

Moví la cabeza de un lado a otro antes de contestar.

_ No, solo estoy contestando a tu pregunta_ dije.

_ Kristen, eres diferente a todas las mujeres que he conocido, ahora entiendo porque Rob se siente tan atraído por ti.

_ ¿De qué diablos hablas? _ dije molesta.

_ Sabes de que hablo_ contestó_ sabes que si dependiera de mi estarías conmigo.

Esta vez el rubor que se me subió al rostro no era por la vergüenza, sino por la rabia.

_ Mira Charlie, eres un buen chico, pero creo que estas llevando las cosas muy lejos.

Sacó ambas manos de los bolsillos y las colocó enfrente como una barrera protectora, pidiendo disculpas.

_ Lo siento, lo siento, está claro que no es como tratar con una chica como tú, rompes todos mis esquemas. No quise parecer grosero.

_ Charlie dejemos las cosas como están_ dije.

_ Tienes razón_ contestó_ después de todo hay alguien que nos está observando y creo que él tiene todas las de ganar, aunque aún no me explicó porqué_ dijo haciendo un gesto indicando algún lugar detrás de mi espalda.

Se retiró inmediatamente, mientras yo volteaba a ver de qué era lo que él estaba hablando.

Inmediatamente sentí una punzada en el pecho, Rob estaba viéndome desde el otro lado del set, su mirada era intensa y parecía molesto.

 

RPOV

 

Kristen se encontraba en sesión de maquillaje, estábamos a poco tiempo de iniciar las grabaciones, cuando Charlie se le acercó e inició una conversación con ella, Kristen estaba dándome la espalda, por lo que no podía ver su rostro. Charlie estaba flirteando con ella era evidente, estaba utilizando todas sus artimañas con Kristen, lo conocía bastante bien, y sabía que ella no había pasado desapercibida ante sus ojos, a quien quiero engañar, Kristen no pasaba desapercibida ante los ojos de nadie.

Tal vez no podía ver a Kristen, pero si podía estudiar su lenguaje corporal, se movía de un lado a otro y se pasaba la mano por el pelo varias veces, luego soltaba sus manos a los costados de su cuerpo en actitud molesta, era claro que se sentía incómoda.

La conocía muy bien, sabía que ella era muy tímida, pero ¿hasta cuando se sentiría así? Ella era libre ahora de aceptar las galanterías de cualquier hombre que ella quisiera.

Odiaba esto, ella era mía, y esto no tenía sentido, me moví inquieto y fijé mis ojos en Charlie, si mi mirada pudiera matar, era seguro que él estaría muerto ahora.

Charlie notó mi rabia inmediatamente, desde luego jamás haría una escena, ni me pondría a discutir con el por esto, pero era seguro que él se había dado cuenta que entraba en terreno peligroso.

Hizo un gesto hacia donde yo me encontraba y se retiró, dejando a Kristen sola. Ella volteó y al verme me miró en forma resignada. Aquella mirada me ablandó el corazón. Se mordió el labio inferior y desvió la mirada inmediatamente y luego me dio la espalda y caminó alejándose.

 

 

 

Era mi 3 cerveza de la noche, Sam estaba recostado en el sofá con los brazos sobre el respaldar observándome detenidamente, tratando de comprender por lo que yo estaba pasando.

_ ¡Y Charlie estaba allí coqueteando con ella descaradamente!_ dije levantando la voz mientras caminaba de un lado a otro de la habitación con la cerveza en la mano.

Sam, no pareció inmutarse, siguió observándome sin decir palabra.

_ ¡Di algo!_ dije fastidiado, gesticulando con la mano.

Sam suspiró profundamente y estiró una de sus manos hasta alcanzar su cerveza que estaba sobre la mesa. Tomó un gran sorbo de ella antes de animarse a decir palabra.

_ ¿Qué quieres que te diga, amigo? Tu y ella terminaron, ella es una mujer hermosa, siempre habrán hombres intentando acercarse a ella.

_ Diablos Sam! Se supone que eres mi amigo, se supone que estás de mi lado.

_ Y lo estoy Rob, por supuesto, pero si entre ustedes ya no hay nada, eso significa que tanto tu como ella son libres.

_ Diablos Sam! Yo no quiero ser libre, y es seguro que Kristen tampoco estaba a gusto con los coqueteos de Charlie.

_ Entonces, no entiendo a qué va esto, Rob_ dijo frustrado.

Me senté en el sofá que tenía a mi lado, dejé la cerveza sobre la mesa y hundí mi rostro entre mis manos. Respiré profundamente un par de veces y hablé sin separar mi rostro de mis manos.

_La quiero, lo sabes, quiero que regrese a mí.

_ Rob hermano, sabes que quiero lo mejor para ti, también quiero lo mejor para Kristen, la aprecio mucho, es una buena amiga, y ha sido buena contigo. Pero también la entiendo, no me imagino ni por un minuto como sería la vida en una situación como la suya, no puedo juzgarla, no puedo decir que te quería menos, ni que le importaras poco, no sé lo que sería vivir en constante zozobra, en constante peligro, teniendo que vivir pendiente de cada persona que camina al lado suyo, pensando que alguna desquiciada pudiera hacerle daño.

_ Lo sé_ dije mirándolo_ pero eso no impide que la quiera conmigo.

_ Rob, sigue adelante, eso es lo que ella quiere, seguir adelante, quiere una vida tranquila, déjala tenerla.

_ No puedo creer que me estés diciendo esto_ dije.

_ Rob, tal vez ella nunca fue para ti, amigo.

Me levanté y encendí un cigarrillo, que Sam me estuviera diciendo esto no me ayudaba en nada.

_ Sal a la calle, vive tu vida, hay muchas mujeres que mueren por estar contigo hermano, trata de olvidarla.

_ No puedo.

_ Tal vez no quieras.

_ Está bien, ¡no quiero!_ dije desesperado.

_ Rob jamás te vi de esta forma por nadie.

_ Lo sabes muy bien, nadie me ha interesado como ella. Kristen es la única que me conoce, ella me entiende, me comprende. Nadie más lo hace.

_ Date una oportunidad, deja que alguien más te conozca.

_ Hombre, ¿no puedes entenderme?

_ Créeme, lo hago perfectamente, pero tienes que cerrar esta página y seguir adelante amigo, se que te duele, lo puedo ver, pero te aseguro que esto pasará. Después  de algún tiempo solo te reirás al recordarlo.

_ Quisiera creerte, pero ahora no lo veo así.

Sam se levantó y tomó la guitarra

_ Déjame que te cante aquella canción que compusimos en Nueva York, la tengo lista al fin, ¿quieres oírla?

_¿Por qué no?_ dije desanimado_ ¿Cómo la haz llamado?

_ Fucking lights

Sam afinó unas notas en la guitarra y empezó a tocar.

 

Fucking lights, straining my eyes.
No sleep at night. It's just a waste of time.
And LA's burning ... NY's painted black.

 

La canción sonaba muy bien con los arreglos que Sam le había hecho, recordaba perfectamente el contexto en la que la escribimos, me encontraba totalmente desolado en Nueva York, Kristen lejos de mi, la gente que me perseguía solo por verme, los paparazis que me seguían todos los días y las revistas de chismes inventando rumores con Emilie, solo para hundirme.

London's calling, calling me back.
Simple patterns make me crack.
Fucking lights, Hurts my head.
Borrowed youth.
All those wasted years.

 

Sam sabía lo que hacía, me estaba dando un poco de mi propia medicina, en aquellos meses me sentía totalmente estresado, solo quería estar con Kristen, y quería que todo lo demás desapareciese. Y todo lo que me rodeaba solo me traía problemas.

And LA's learning . NY too.
London's calling, I'm calling you.
What doesn't matter , Still holds its truth,
That nothing matters, When I'm with you,

 

Aquellos meses en Nueva York fueron difíciles, pero lo superamos juntos, Kristen y yo,  pero todo esto aún seguía,  los paparazis, las fans, las luces, los flashes, los chismes, el estres, solo que un factor más se había incluido en esta ecuacón sin solución aparente, las amenazas hacia Kristen.

 

Cities only fill the void of the people wasting, wasting time on you.
Pretty lies and secret love,
Nothing gets me what I want from you,
From you, All I want,
What I want from you.

 

 

Lo entendía perfectamente, entendía como ella se sentía, el problema era que no quería perderla. Una cosa es la razón y otra muy distinta el corazón.

Sam dejó la guitarra a un lado y me miró esperando algo.

_ Y ¿Qué te parece?_ preguntó.

_ Se oye genial_ contesté, evitando mirarlo.

Sabía que no se refería a como sonaba la canción.

_ Rob....

_ Lo sé amigo, se lo que quieres decir, lo entiento, la entiendo, sé que me sentía sin escapatoria mientras estuve en Nueva York, sé que ella se siente así o peor, es solo que no puedo dejarla ir.

Sam suspiró.

_ Amigo estás perdido.

 

 

 

KPOV

 

Mi teléfono celular estaba sonando incansablemnete, no tenía ganas de hablar con nadie, pero si insitían tenía que ser importante. La llamada era de Ruth mi publisista.

_ Ruth, ¿que novedades?

_ Vaya Kristen, también me da gusto escucharte_ dijo sarcásticamente.

_ Lo siento Ruth, ¿cómo estas?

_ Mejor que tu por lo que veo.

_ Ruth por favor....

_ Está bien, te he enviado un correo electrónico con las fotografías que han escogido para la revista Harper’s Bazzar. Quiero que revises todo a ver si deseas cambiar algo, Rob estará recibiendo un correo igual. Hazme saber que piensas.

_ Está bien Ruth, te llamo luego_ dije.

Suspiré, aquella entrevista y esa sesión fotográfica, parecía todo tan lejano ahora.

Caminé hasta mi lap top y la encendí, revisé el correo y leí la entrevista antes de abrir el archivo con las fotografías. La entrevista había sido muy abierta comparada a otras que había realizado, Rob y yo nos permitimos comentar un poco más sobre lo bien que nos conocíamos. Había salido algo muy entretendo e interesante, me gustaba, no hablaba sobre nuestra relación personal, pero era evidente que nos concíamos muy bien.

Sentí un nudo en la garganta, sabía que no había nada que cambiar, todo lo que decíamos era la verdad. Una verdad que seguiría allí aunque nunca volvieramos a estar juntos.

 

La periodista había entendido perfectamente lo profunda de nuestar relación, aunque no había confirmación sobre lo nuestro. Pero todo estaba allí, a buen entenderdor pocas palabras, me sentí vacía, más dudas me embargaban, esta vez no dudaba de si nuentra relación era lo correcto, sino por el contrario, dudaba de haber hecho lo correcto al terminar con el.

Cerré los ojos fuertemente, tratando de evitar las lágrimas, lo extrañaba aunque lo viera todos los días en el set, era terrible saber que nuestras escenas románticas aún no habían concluido, era muy duro tener que estar en sus brazos sabiendo que estabamos separados.

Procedí a revisar las fotografías, el primer archivo eran de las fotos que habían escogido para la portada y para el artículo. En la portada estabamos juntos, yo llevaba un vestido negro muy escotado en la espalda, era realmente sey, Rob me sujetaba muy cerca a su cuerpo, ambos lucíamos felices y compenetrados.

Es difícil olvidar aquella sesión, hacía mucho tiempo que no hacíamos una los dos solos, y fue en agosto, poco después de llegar a Vancouver, después de haber estado separados por nuestros proyectos. Estabamos realmente felices de hacerla, era una forma sutil de indicar que estabamos juntos, no era una sesión de fotografía sobre Edward y Bella, no, eramos Nosotros dos, Rob y Kristen.

 Observé las demás fotografías, en todas solo teníamos ojos el uno para el otro. La siguiente carpeta contenía todas las fotografías que nos habian tomado, eran muchas y cada una de ellas reflejaban mis sentimientos hacia el.

Fueron tiempos muy buenos, acababamos de regresar juntos después de muchos dramas y estabamos felices de estar uno al lado del otro, ahora todo eso se veía a miles años luz de distancia.

Y no pude más,  lloré, hacía días que no lo hacía y realmente lo necesitaba, necesitaba desahogarme, y tratar de convencerme que era eso lo que yo realmente quería, volver a tener mi vida como antes de haberlo conocido.

Pero el destino me tenía otra cosa en el camino, el celular volvió a sonar y lo contesté de inmedito sin siquiera pensarlo dos veces, era ella, la sicópata que se había propuesto hacerme la vida imposible.

_ Veo que has estado llorando_ dijo_ supongo que Rob por fin se dió cuenta de la clase de mujer que eres.

_ ¿Qué es lo que quieres? _ contesté tratando de disimular mi voz llorosa.

_ Lo de siempre, sabes que es agradable para mi poder hacerte la vida imposible, en especial cuando sé que jamás podrás encontrame. Déjame decirte, que estoy al tanto de que Rob y tu terminaron, es lo mejor que pudiste haber hecho. Rob es mío y de nadie más, jamás podría haberte tomado en serio, eres una cualquiera, que le puso los cuernos  a su novio con su coestrella del momento, ¿que pensabas?, que Rob iba a querer algo serio contigo? Eres una mujersuela.

_ Bien, si ya sabes que Rob y yo terminamos, no veo porque tengas que seguir llamándome, ya tienes lo que querías_ dije muy tranquila y segura de mi.

_ Voy a seguir llamándote hasta que me de la gana_ dijo y cortó la llamada.

Suspiré profundamente, no tenía sentido, nada tenía sentido, mi vida jamás sería igual, debía aceptarlo, Twilight me cambio la vida en muchos sentidos, y debía reconocer que en la mayoría habían sido cambios positivos. Debía aceptar que tenía que luchar contra la parte negativa o simplemente no darle importacia, después de todo si sopesaba las cosas buenas que tenía con la parte mala, ganaban las buenas.

Decidí dejar de luchar contra la persona que me hacia las llamadas, decidí hacerla parte de mi vida, como si fuera una enfermedad con la que no puedes luchar, pero con la que se puede convivir. Tal vez asi viviría más  tranquila, pero desde luego a penas tuviera la oportunidad de saber quien era la atraparía.

Caminé hasta la puerta del balcón de mi habitación, sabía que hacía frío afuera pero necesitaba un cigarrillo y la brisa helada de la calle. Encendí el cigarrillo mientras salía, cerré los ojos profundamente mientras aspiraba una bocanada de humo que llenón mis pulmones inmediatamente producinedome un alivio instantáneo.

Me quedé allí por un momento, Rob estaba tan cerca y a la vez tan  lejos y lo necesitaba, y pensar que solo estaba a unos metros de mi, al lado de mi habitación. Inconcientemente abrí los ojos y volví mi cabeza a un costado buscándolo, y para mi sorpresa Rob estaba en su balcón observándome.

Mi corazón dió un vuelco, y mi nerviosismo pudo más, tiré el cigarrillo al suelo y lo apagué de una pisada, y me introduje dentro de la habitación inmeditamente.

No podía creer que hubiese actuado de esa manera, salir corriendo  de aquella mirada penetrante como si fuera una chiquilla de 15 años.

Esto sería mucho más difícil de lo que creía.

 

 

 

 

RPOV

 

Salí al balcón para fumarme un cigarrillo, la noche estaba clara pero muy fría, pero era agradable sentir en el rostro aquel frío intenso.  Hacía dias que Kristen y yo terminamos, pero las cosas no mejoraban entre nosotros, hablábamos solo lo necesario y era evidente la tención entre nosotros.

Supongo que el que le haya dicho que no podía ser su amigo había complicado las cosas. No sabía como solucionar eso, quería que esta parte pos ruptura fuera menos complicada, pero no sabía que decir o que hacer.

La noche anterior había salido con gente del cast por unas cervezas a un bar, era raro, había salido solo antes mientras estaba con Kristen, pero ahora se hacía todo tan diferente ya que sabía que estaba solo.

Siempre me había gustado salir por unos tragos con amigos, eso siempre me había relajado, pero ahora se sentía todo tan vacío.

Oi un ruido a unos metros de distancia, venía de la habitación de Kristen, ella había decido hacer lo mismo que yo, tomar un poco de aire mientras se fumaba un cigarrillo. Ella no me vió, solo cerró los ojos e inhaló una profunda  bocana de su cigarrillo y permaneció asi por un momento como sopesando algo que realmente la preocupaba.

Se veía hermosa, su piel se veía iluminada por una ténue luz que venía del otro lado de la calle, sus labios semi partidos me recordaban todas aquellas veces en que por derecho los clamé como mios, algo que en aquel momento moría por hacer.

Mi mente empezó a trabajar intensamente, buscando una salida a todo aquello, y si simplemente la llamaba e intentaba entablar una conversación? Le hablaría del clima, o tal vez de la escena de mañana o tal vez me atrevía  a más y le pregunto  si podía acompañarla mientras nos fumábamos los cigarrillos.

Pero no quise presionar mi suerte, tal vez me mandaba a rodar. Asi que me quedé ahí observándola, viendo su cuerpo en aquella posición tan familiar, estaba tensa, y trataba de relajarse con aquel cigarrillo. Hubiera dado lo que fuera por estar detrás de ella y besar su cuello y recorrer su espalda con mis manos tratando de relajarla un poco. Pero tal vez me engañaba y era yo el causante de aquella tensión.

Volvió a inhalar otra profunda bocanada del aromático humo sin abrir los ojos, como concentrándose mejor en sus sentidos, y luego exaló con lenta y morosa satisfacción, supongo que el cigarrillo la estaba ayudando al fin.

De repente abrió los ojos y volteó la cabeza a su derecha como buscándo algo y grande fue su sopresa al verme, y una muy mala debo agregar que apagó su cigarrillo con el pie y se introdujo inmediatamente a su habitación sin darme tiempo siquiera a decirle hola.

Me quedé hecho un idiota, y con el corazón roto, la situación era mucho peor de la que yo imaginaba, ella no podía verme, huía de mi, mi mente no podía aún encontrar una explicación a todo esto, de estar felices y totalmente compenetrados uno con el otro pasamos a ser dos extraños que no pueden siquiera decirse hola.

Apagué mi cigarrillo y decidí ir a aquella fiesta a la que me habían invitado algunos miembros del equipo técnico, era lo meor que podía hacer, definitívamente necesitaba unas copas en aquel momento.

Caminé por las calles de Vancouver con las manos en los bolsillos y la espalda enconvada, no solo porque hacía frío sino porque la situación me hacía sentir desposeído.  Quise volver, tocar a su puerta y encararla, pero me contuve aún no era el momento, tenía que pensar bien las cosas, y mi mente no podía concentrarse en nada que no fuera ella en ese momento. Seguí caminando hasta que llegué al bar, entre y me acerqué a las mesas en las que estaban los miembros de Eclipse, me recibieron un una cerveza que la apuré inmediatamente, el sabor semi amargo del lúpulo se inició en mi paladar y recorrió toda mi garganta en pocos segundos. Inmediatamente me sirvieron otra y me encargué de pedir otras rondas para la mesa.

Era justo lo que necesitaba al principio ya que la bebida tenía aquel efecto relajante y embriagante al inicio, no pensé mucho más en lo que pasaba hasta que estuvo por la cerveza número 5, Kristen volvió de nuevo a llenar mi mente, sacudí la cabeza pensando en que tenía que encontrar una solución, yo estaba seguro que ella me amaba, no podía haberme dejado de amar en tan poco tiempo.

Me despedí dos cervezas después y caminé de nuevo en aquella noche fría rumbo a mi hotel, a nuestro hotel, rumbo a la habitación en donde habíamos pasado muchas noches juntos, amandonos, o simplemente compartiendo el espacio, compartiendo nuestro tiempo, se me hacía difícil entrar ahí ahora y saber que ella no estaría en mi cama esperándome.

Me tumbé en la cama boca abajo y no recuerdo más, solo cerré los ojos y el sueño se encargó del resto.

 

 

 

El teléfono sonaba incansablemnete, lo busqué en el bolsillo de mi pantalón, ya que  la noche anterior no había tenido tiempo de sacarme la ropa, o tal vez fuera que no tenía la voluntad de hacerlo.

_ ¿Si?_ pregunté.

_ Rob tienes  15 minutos para estar en el lobby_ decía la voz de Dean al otro otro lado de la línea.

_ Mierda_ contesté incorporándome_ Lo siento Dean no es a ti a quien va dirigida esa grosería.

_ Rob, no importa, solo apresurate, no deberías llegar tarde.

_ Lo sé estaré allí lo antes posible_ contesté.

_ Está bien_ dijo y cortó la comunicación.

Me desnudé y me metí a la ducha inmediatamente, no podía presentarme así al set, más aún porque ella estaría allí y no quería que me viera como si hubiese estado bebiendo toda la noche, aunque fuera eso exáctamente lo que estuve haciendo.

Me vestí con lo primero que encontré y salí al lobby en donde Dean me estaba esperando.

_ Buenos días Deam

_ Veo que no muy buenos para ti_ contestó

Yo solo le sonreí.

_ Por el contrario, he tomado la decisión de que mi vida vuelva por su curso normal_ contesté con nuevos bríos.

_ A veces no solo depende de nuestras deciciones_ contestó.

_Diablos Dean! ¿por qué tienes que ser tan realista? Dejame soñar!

El sonrió.

_ Lo siento tienes razón, dejame decirte esto, es algo que lo tengo en la mente hace algún tiempo pero no quería decirte nada.  Se que las cosas se van a arreglar, ustedes dos solo son felicies cuando están juntos.

_ Dean no pensaba que fueras tan romantico_ dije bromeando mientras subíamos al automóvil.

_ No diría eso, es solo que sus ojos brillan cuando te ve, y tu te sientes completo cuando ella esta cerca a ti.

No pude seguir burlándome de Dean, el tenía razón al menos en lo referente a mi.

_ Ella no me quiere a su alrededor_ dije bajando la mirada.

_ Rob, claro que si, es solo que está pasando por momentos de incertidumbre y preocupación, dale tiempo.

_ Dean hablando de eso, has hablado con John, sabes algo más que yo debería saber?

_ NO, todo sigue igual, ella sigue recibiendo aquellas llamadas, pero ya no son tan constantes.

_ Gracias, Dean, tengo que estar enterado de todo, no puedo dejarla a su suerte.

_ Estas haciendo todo lo que está en tus manos para que ella esté segura.

_ No, creo que haga lo que haga, no puedo protegerla al 100%.

_ Nadie puede proteger a nadie al 100%, pero estás haciendo todo lo que puedes. Hasta vas a pagar ese sistema de rastreo que te recomendó la policía, eso es mucho Rob.

_ No es suficiente, y eso me asusta.

_ Rob, no puedes hacer más, estas haciendo todo lo que puedes.

Asentí, miré atravéz de la ventana y me quedé en silencio, Dean no dijo más me dejó ensimismarme en mis pensameintos, los que me llevaron a ella, y traté de ser positivo, ella me amaba estaba seguro y eso haría que volvieramos a estar juntos.